La novela de Miguel de León se lee fácil y consigue que el lector se pregunte insistentemente, y según va devorando renglones, el por qué de cada historia. Miguel de León es un escritor tinerfeño que inspira esta su primera novela en una de las joyas de nuestra literatura, Cien Años de Soledad, de Gabriel García Márquez, su gran referente. Y se nota. Los Amores Perdidos retrata una trama compleja, a ratos costumbrista, pero siempre ágil y dinámica que se lee hasta la última línea con buen anhelo.
Los libros, principio y fin. A los que leí debo lo que soy; en los que he escrito está lo mejor de mí; los que quisiera leer y escribir, darán sentido a lo que me quede de vida.